El Antahkarana es un símbolo antiquísimo de Sanación y
Meditación que ha sido usado en el Tíbet y la China durante miles de años.Este símbolo tiene un poder energético muy grande; ya
que simplemente por estar en su presencia crea un efecto positivo sobre los chakras y el aura, realizando sanación, concentra y
profundiza todas las energías de sanación aplicadas en su presencia. El Antahkarana es parte de la anatomía espiritual, es la
conexión entre el cerebro físico y el Yo superior, esta conexión es la que debe
sanar y desarrollar para poder crecer espiritualmente. Este símbolo activa esta
conexión cada vez que nos hallamos ante su presencia.
En meditación este poderoso símbolo, crea automáticamente lo que los taoístas
llaman “La gran órbita microcósmica”, donde las energías físicas que
normalmente entran por el chakra coronario, ante la
presencia de este símbolo entran por los pies y suben por la parte posterior
del cuerpo hasta la parte superior de la cabeza, bajando por la frente nuevamente
hasta los pies, realizando un círculo lumínico cimentando de esta manera la
persona a la tierra y creando un continuo flujo de energía a través de los chakras.
Entre las propiedades de este símbolo, neutraliza la energía negativa que se
haya acumulado en objetos tales como cristales, joyas, etc., simplemente
colocando entre dos símbolos el objeto.
Este símbolo tiene efectos tan positivos, lográndose notables resultados en el
Reiki con ellos como en Meditaciones; ya que producen un notable cambio de
flujo energético en el aura y los chakras.
El Antahkarana es un símbolo multidimensional. Está
constituido por tres siete sobre una superficie plana, desde una perspectiva
parece bidemensional. Los tres siete representan los
siete chakras, los siete colores y los siete tonos de
la escala musical. Desde otra perspectiva aparece como un cubo tridimensional.
Su energía se mueve desde dos a tres dimensiones visibles, continuando hacia
arriba por vías energéticas imperceptibles para el ojo humano, continuando
hacia arriba hacia la dimensión del Yo superior.
La meditación con este símbolo mirando constantemente al centro del mismo
produce un cambio positivo energético.
La meditación tibetana con estos símbolos era realizada en una habitación
iluminada con velas. En el medio había una vasija de barro en forma de óvalo
simbolizando el huevo cósmico del universo, esta vasija se llenaba con agua,
frente a la misma había un pequeño taburete, sobre el asiento de éste estaba el
símbolo antahkarana realizado en plata, donde se
sentaba la persona que iba a meditar.
Había también una pared cubierta con cobre, pulido como un espejo. En la pared
opuesta a esta habían tapices que mostraban símbolos. El lama tibetano se
sentaba en el banquito y miraba fijamente la imagen del símbolo que se
reflejaba en el espejo de cobre. Esta meditación es una meditación yantra y crea agudeza en la mente, haciendo un puente
energético entre la conciencia y las energías trascendentales del símbolo;
mientras que el otro símbolo antahkarana en el
banquito enfoca las energías generadas haciendo fluir las energías equilibradas
por todos los chakras hacia la tierra. Este
maravilloso símbolo es muy especia y tiene su propia conciencia. Trabaja
directamente sobre el aura y los chakras y regulariza
variando los efectos de sanación de acuerdo a las necesidades de la persona que
lo usa, al estar dirigido por el Yo superior tiene un efecto benéfico. Jamás se
lo deberá utilizar para el mal.
Este símbolo tiene muchísimos usos: se los puede colocar debajo del colchón de
la cama en la que uno duerme, debajo de una mesa de masajes, colgado de una
pared para armonizar el lugar, exponerlo sobre alguna dolencia, etc.
Antahkarana YIN Antahkarana
Yang
Estos dos Antahkarana son utilizados para la descarga
de energías negativas, colocando el Yang debajo el objeto a descargar y encima
el Yin.
Es conveniente para las meditaciones utilizar siempre el antahkarana
Yang.
Símbolos Múltiples
La cruz cósmica está constituida por antahkaranas que
se cruzan entre sí, representando los siete chakras
mayores, su función es el de purificar las energías, se usa para abrir el
corazón y equilibrar las energías. Este maravilloso símbolo con que cuenta la radiónica es fácil de experimentar de investigar, de fácil
uso, y para la persona que desea explorar sus usos en el viaje de regreso a la
luz, confiando sólo en la luz y para el mayor bien.
Este símbolo múltiple de 16 cuadritos, repetidos iguales, sirve para dispersar
la energía y se utiliza ubicado en algún lugar donde se necesite remover y
dispersar las energías negativas. Debajo del felpudo de la entrada principal,
detrás de algún cuadro, de un espejo (es para que las personas fijen a la
mirada en él). La persona que entra en la casa y que a veces trae consigo alguna
vibración negativa, al pisar el felpudo con el símbolo debajo, ésta absorbe
estas vibraciones. Hay que tener cuidado con él de no colocarlo en muchos
lugares a la vez, porque así como dispersa la vibración negativa, también lo
puede hacer con la positiva; es decir la función real de este símbolo múltiple
es dispersar energías.
Meditación con Antahkarana.
La meditación con Antahkarana se realiza de la
siguiente forma.
Vestidos con ropas sueltas, después de un baño, nos sentamos relajados frente
al símbolo Yang del Antahkarana. Fijamos la vista con
los ojos entrecerrados en el centro del símbolo, tratando de respirar
relajadamente. Mantendremos la mirada suave, el tiempo que más se pueda en el
símbolo, éste actuará sobre nuestra mente por sí mismo.
Practicando diariamente y después de un tiempo, la imagen comenzará a moverse,
desvanecerse o desaparecer por completo, si esto ocurre es positivo, ya que
indica que ha entrado a un nivel más profundo de meditación y está recibiendo
mayores beneficios. Podrá también ver distintas figuras frente al símbolo, esto
es también positivo, con el uso continuo, diez minutos diarios.
Meditacion con mándala de Cuarzo y antahkarana.
Estos símbolos Antahkarana encierran en ellos
muchísimos secretos, como a mí personalmente me apasiona investigar el porqué
de las técnicas energéticas; este signo en especial me llamó la atención y pude
comprobar que en combinación con un mándala de cuarzo produce efectos
revitalizantes inmediatos, restaurando el aura de personas con alteraciones
nerviosas aparentemente sin motivo físico, de allí surgió esta meditación:
Colocando el mándala de cuarzos en la espalda de la persona con falta de
vitalidad y trastornos nerviosos y debajo de los pies un símbolo yang antahkarana, enseñándole los ejercicios Hui-Yin
se produce con el sólo contacto de los dos símbolos el equilibrio del flujo
energético a través de los chakras, tranquilizando el
flujo del chakra base en un tiempo menor que los
otros vórtices energéticos, el símbolo en los pies logra junto con el mándala
de cuarzos orientar armónicamente las distintas calidades de energías del
cuerpo humano, que realmente son ocho clases de energías, fuera totalmente de
los chakras mencionados por los hindúes. He logrado
con esta meditación una vez por semana, acompañando al paciente de diez a
quince minutos, revitalizarlo y equilibrarle todos sus sistemas.
El Antahkarana
Este símbolo sagrado se ha mantenido en secreto por miles de años, conocido y
usado por muy pocos. Ahora ha llegado el tiempo para que todos tengan acceso a
él.
El Antahkarana es un símbolo antiguo para sanación y
meditación que ha sido utilizado en el Tíbet y la China desde hace miles de
años. Es un símbolo muy poderoso, y con solo tenerlo cerca de ti crea un efecto
positivo en tus chakras y en tu aura.
Al ser usado en terapias de sanación, aumenta y concentra la energía
canalizada, además de acelerar el proceso. Algunos Maestros de Reiki han usado
este símbolo con excelentes resultados. Cuando se utiliza en las meditaciones,
produce automáticamente lo que los Taoístas denominan “la gran órbita
microcósmica”, lo que significa que la energía que normalmente entra al cuerpo
por el chakra de la corona, lo hace por los chakras de los pies, y sube por la parte posterior de la
espalda hasta la cabeza, para luego bajar por el frente del cuerpo hasta los
pies, creando así un flujo continuo de energía en todos los chakras.
También neutraliza la energía que se encuentra acumulada en los objetos, como
joyas o cuarzos, con solo colocar el objeto entre dos símbolos.
Este símbolo es multi-dimensional. Desde una
perspectiva parece ser de dos dimensiones, pero esta formado de hecho por tres
sietes en una superficie plana. Los tres sietes representan los siete chakras, los siete colores y los siete tonos de la escala
musical. Los tres sietes son mencionados en el Libro de Revelaciones como las
siete velas, las siete trompetas y los siete sellos. Desde otra perspectiva,
este símbolo parece ser un cubo de tres dimensiones. Su energía se mueve hacia
arriba de dos a tres dimensiones visibles y continúa de esta manera hasta
llegar a la mas alta dimensión – la dimensión del Ser Superior.
El uso de este símbolo se remonta en la historia a una antigua técnica de
meditación Tibetana. Unos pocos maestros de meditación lo conocían y lo
mantenían en secreto para acelerar su crecimiento. La práctica de la meditación
tibetana tomaba lugar en una habitación iluminada con velas. En el centro de la
habitación se encontraba una vasija grande de barro en forma ovalada, la cual
simbolizaba el huevo cósmico del universo. La vasija se llenaba con agua y se
colocaba en ella un banquillo en el cual estaba grabado en plata el símbolo Antahkarana.
Una pared de la habitación estaba cubierta de cobre pulido, el cual parecía
espejo, y en la pared opuesta se colgaban tapices que mostraban los símbolos de
sanación Reiki . Entonces un meditador Lama Tibetano
se sentaba en el banquillo y veía fijamente las imágenes de los símbolos Reiki
reflejadas en el espejo de cobre pulido. Esta meditación unía así el
conocimiento interior del meditador con las energías trascendentales de los
símbolos Reiki, en tanto el Antahkarana en el
banquillo enfocaba las energías generadas y las hacía que fluyeran por todos
los chakras y hacia la tierra. Los Tibetanos
no son los creadores del símbolo, y no se cuenta con ninguna escritura acerca
de su verdadero origen. Sin embargo, por percepción clarividente, Michelle
Griffith ha logrado leer la historia psíquica del Antahkarana.
De acuerdo a Michelle, el símbolo fue entregado a los pobladores de la tierra
durante los tiempos Lemurianos hace mas de 100,000
años, al mismo tiempo que el Reiki fue traído al mundo por el Espíritu Santo.
El Antahkarana fue creado por un consejo de Altos
Maestros encargados de vigilar la evolución de la galaxia. Los Maestros vieron
la necesidad de la gente de restablecer la conexión con el Ser Superior, y
crearon el símbolo y lo impregnaron con un decreto de amor. Es el Ser Superior
quien crea y guía los beneficios obtenidos por el uso del símbolo y por tanto
es imposible usarse con fines negativos.
Instrucciones para el uso del símbolo
El Antahkarana es un símbolo especial que tiene su
propio sentimiento interior. Trabaja directamente con tu aura y tus chakras, y su efecto sanador varía dependiendo de las
necesidades de cada persona. Los símbolos pueden ponerse debajo de una mesa de
masajes o de una silla, en la pared o sobre alguna zona del cuerpo que requiera
sanación.
Meditación
Nos sentamos muy cómodamente, aspiramos tres veces aire profundamente, y lo
llevamos a nuestro plexo solar, inflando nuestro vientre, recorriendo con el
nuestros órganos y nos vamos relajando, dejamos salir el aire muy despacio,
aspiramos dos veces más, profundamente, llevando el aire a nuestro pecho y
recorremos con el nuestros pulmones, nuestro corazón y nuestras vías
respiratorias, y nos seguimos relajando, volvemos aspirar profundamente dos
veces, y con cada respiración recorremos nuestros pies, nuestras piernas,
dejamos salir el aire muy despacio y continuamos relajándonos, volvemos a tomar
aire profundamente dos veces más, y lo enviamos a nuestros brazos, recorriendo
cada articulación, soltamos el aire muy despacio y continuamos relajándonos,
volvemos a inspirar y el aire que recibimos lo enviamos a nuestros hombros, lo
hacemos recorrer nuestro cuello y nuestra cabeza y dejando salir el aire muy
despacio entramos en total relajación. Ahora estamos listos para entreabrir
nuestros ojos y los dirigimos hacia el símbolo del Antahkarana,
nuestra mirada permanecerá fija y relajada en el centro del mismo, y
continuamos respirando relajadamente, mantenemos la mirada suave el tiempo que
más podamos, cada uno de nosotros recibirá al símbolo en su interior y lo
fijara en su mente, dejándolo actuar, el nos conducirá a nuestros estados
superiores, hasta alcanzar nuestro Yo Superior. Trataremos de mantenernos
mirando un poco más de tiempo, ir repitiendo en intervalos cortos para lograr
mantener la atención de los meditantes durante + – 10 minutos. A los que no
puedan seguir con la meditación pedirles que cierren sus ojos y permanezcan en
relajación hasta que todos terminen.
Ahora cerramos nuestros ojos, respiremos profundamente tres veces, y cuando
estén preparados, abran despacio sus ojos. Fin de la meditación.