EN NUESTRO COMPORTAMIENTO
Todos sabemos que los
colores del vestuario y del entorno tienen un cierto efecto en nuestro humor, pero
más allá de ello, el enfoque del artículo se centra en el tipo de ropa que
podríamos estar usando.
Hace un buen tiempo atrás,
leí en un libro escrito por Prentice Mulfolrd
(1834-1891), titulado "Nuetras Fuerza
Mentales", un capítulo dedicado a los efectos de la vestimenta sobre la
psiquis o "la religión de la vestimenta".
Analizando la influencia
de la ropa en la vida cotidiana, el autor estadounidense dice que nuestro
pensamiento es una constante e invisible emanación de nosotros mismos y que
esta emanación substancial es en parte absorbida por nuestros vestidos, de tal
modo que, al envejecer, éstos quedan cada vez más saturados de esos elementos
mentales.
Dice Mulford:
"Si nos ponemos la
ropa de un ser realmente superior a nosotros podemos absorber algo de su
mentalidad. Del mismo modo, si nos echamos encima las ropas de una persona
ordinaria y de mente baja absorberemos algo de su inferioridad". El
escritor también aconseja un cambio de ropa para sentarse a la mesa a comer,
salir a la calle o ir a una reunión. "Si llevamos la que usamos en el
trabajo, nos traeremos una parte de los pensamientos inherentes a nuestras
ocupaciones cotidianas a un lugar donde todo lo referente a los negocios debe
ser dejado de lado", explica.
"Si llevamos puesta
ropa vieja cargamos y afligimos nuestro yo actual con los estados mentales ya
pasados y muertos, sentidos durante las últimas semanas y aun años. Esos
estados de tristeza, de ansiedad, de irritación, también los llevamos
puestos", concluye.
"Si llevamos un vestido
o un traje nuevo -escribe Prentice Mulford- éste nos
hace parecer más alegres y animosos porque la nueva envoltura que nos echamos
encima está libre enteramente de nuestras emanaciones mentales de los tiempos
pasados." Además agrega: "La naturaleza nunca se viste con trajes
viejos y es cierto que lo que place a los ojos descansa a la mente, y lo que
descansa a la mente es una renovación de fuerzas para el cuerpo".
La solución para alejar
esas emanaciones negativas de la ropa usada consistiría en dejarlas a la luz
del sol y al aire libre. Los especialistas, curiosamente, no mencionan para
nada las tintorerías. Sí, en cambio, observan también determinados colores, ya
que éstos "son la expresión de las condiciones y cualidades
mentales". Según algunos estudiosos, "las mentalidades llenas de
desesperanza, de tristeza o de melancolía eligen el color negro". Y los supersticiones observan que el amarillo, claro, atrae la
mala suerte.
Les dejo con el resto de
la información...
Bendiciones Mario Liani
EN NUESTRO COMPORTAMIENTO
La ropa que llevamos
cambia nuestra manera de pensar
Ponerse una camiseta de
Superman te hace sentir más fuerte, según una investigadora británica
La investigadora de
Llevar
un traje de Superman otorga "superpoderes"
La ropa afecta a nuestros
procesos mentales y percepciones, y puede cambiar nuestra forma de pensar,
según una investigación de la profesora Karen Pine, de
Cuando la profesora Pine
pidió a los estudiantes que se pusieran una camiseta de Superman, tenía una
razón científica para hacerlo. Quería saber si la ropa "heroica"
cambiaría el pensamiento de los estudiantes. Descubrió que mejoraba la
impresión que tenían de sí mismos y les hacía sentirse más fuertes físicamente.
Éste y otros descubrimientos de cómo la ropa puede hacer cambiar de opinión,
son el tema de su nuevo libro, llamado Piensa en cómo te vistes: La psicología de la moda
(Mind What You Wear: The Psychology
of Fashion).
Pine, del departamento de Psicología,
explica en la nota de prensa de
Esta y otras investigaciones
sobre la ropa se describen en el libro, que muestra cómo los procesos mentales
y las percepciones de la gente pueden ser modificadas
por la ropa, al interiorizar el significado simbólico de sus capas exteriores.
Matemáticas
en traje de baño
En su libro, la profesora
Pine describe cómo las mujeres que hicieron un examen de matemáticas tuvieron
peores resultados cuando llevaban un traje de baño que cuando llevaban un
suéter. También describe cómo ponerse una bata blanca mejoraba la agilidad mental
de las personas, ya que su cerebro está preparado para asumir las capacidades
mentales que se asocian con ser médico.
El libro de Pine da una
visión fascinante de las consecuencias cognitivas, sociales y emocionales de lo
que llevamos puesto. En investigaciones anteriores había observado que las
mujeres tienen más probabilidades de usar pantalones vaqueros cuando están
deprimidas.
En el libro revela que
cuando las mujeres están estresadas usan menos parte de su armario, dejando de
lado el 90% del mismo, y que la principal razón de que las mujeres se vistan de
gala no es parecer atractivas, sino sentirse seguras.
Por último, señala:
"Además de la investigación científica, el libro también contiene consejos
sobre cómo sentirse más feliz y más seguro con la ropa adecuada, explicando no
sólo que somos lo que vestimos, sino que nos convertimos en lo que
llevamos puesto."
FUENTE: http://www.tendencias21.net/La-ropa-que-llevamos-cambia-nuestra-manera-de-pensar_a34284.html