Mensaje semanal
del Maestro Ascendido Hilarión: del 11 al 18 de enero, 2015 – a través Marlene Swetlishoff
Traducido
por Esther Abreu
Amados,
En el mundo se está produciendo una revolución silenciosa de la conciencia. A
medida que cada corazón se abre a la mayor afluencia de energía, comienzan a
recordar sus conexiones divinas entre sí. Comienzan a ir hacia dentro,
sentándose en silencio y soledad y reflexionando sobre el verdadero estado de
su ser. Se toman el tiempo necesario para entender que el mundo en el que están
viviendo está cambiando rápidamente y se están cuestionando por qué debería
hacerlo. Tratan de encontrar las respuestas a sus muchas preguntas y se vuelven
hacia el internet, donde tienen la oportunidad de
buscar muchas palabras clave que actúan como portales a volúmenes de
información que se despliegan al instante delante de ellos en la gran
biblioteca de conocimiento colectivo. Ellos están buscando respuestas a todo lo
que es la vida realmente, a la existencia del espíritu y al hacerlo descubren
información que abre una nueva realidad para todos ellos. Ellos disciernen
sobre lo que suena a verdad dentro de su propio corazón y alma.
De muchas maneras es un descubrimiento incómodo porque ahora empiezan a
entender que cada persona en el planeta es responsable de sus propias
decisiones y acciones en todo momento, que su alma es responsable por todos sus
actos durante toda su vida y que el mundo que ellos pensaban que era real es
sólo una ilusión proyectada por fuerzas fuera de sí mismos. De esta conciencia
viene el despertar y el deseo de saber donde están dentro del esquema eterno de
las cosas. Este conocimiento les abre nuevos e interesantes caminos y descubren
nuevas posibilidades para sus vidas. A medida que sus corazones se abren a
nuevas posibilidades, ven que sólo se requiere de su atención, intención y
voluntad. Su horizonte se expande en muchos aspectos y comienzan a explorar nuevas
posibilidades para sus vidas, con pensamientos nuevos y nuevas acciones que
pueden asumir para hacer su vida mejor que antes.
Miran a las personas en sus vidas a través de una nueva percepción. Ven que en
sus relaciones con los demás pueden aprender más acerca de su propio carácter,
que lo que ven en las personas de su entorno que les gusta y admiran es una
cualidad que ellos mismos encarnan. Y lo que no les gusta en el carácter de
alguien es también una parte de su propio carácter. Ellos empiezan a tener una
actitud más compasiva hacia sí mismos y hacia los demás, y ven que cada
encuentro con otro ayuda a ampliar su comprensión de la vida y del amor y les
ayuda a ver más de lo que son como personas. Eligen ser más amorosos, a
aceptarse a sí mismos y a las personas en su esfera de influencia y a aceptar
el mundo tal como es. Ahora entienden que su mundo personal es el resultado de
sus pensamientos y de que pueden cambiar sus pensamientos por otros más
amorosos y, de esta manera, crear una vida y un mundo que es un encanto
experimentar.
Comienzan a confiar en un poder superior que siempre ha estado actuando en sus
vidas individuales, el poder universal del amor que siempre los guía y resiste
el paso del tiempo, y a través de esto, sus vidas adquieren un mayor
significado y propósito. Al permitirse sentir y experimentar el amor que los
baña y a todos en su planeta, se dan cuenta de que nada puede dañarlos o tener
un efecto negativo en ellos a menos que permitan la entrada del miedo.
Al mantener un corazón y mente abiertos y
confiando en el poder curativo del amor para transformar sus vidas,
experimentan más alegría y felicidad en todas los ámbitos de la existencia. Al
confiar en la verdad de sus corazones y en sus propias intuiciones, atraen
hacia ellos todo lo necesario para crear lo que es el deseo de sus corazones y
una mayor paz y claridad se manifestarán en su cotidianeidad.
Hay un orden divino natural que existe dentro de toda la creación y que en la
vida de todo el mundo siempre se mantiene en un equilibrio perfecto. Cada
experiencia que atraviesa una persona es una lección de amor y sabiduría que
sirve a un propósito más profundo que lo que una persona puede saber en el
momento que lo experimenta. Todo el mundo tiene la capacidad de levantarse mental
y emocionalmente, por encima de todo lo que enfrenta en la vida y trascenderlo.
Las
actuales pruebas de la vida que cada persona está experimentando en estos
tiempos como individuos y como colectivo, exige cada vez una mayor compasión,
tolerancia, paciencia y bondad. Estas cualidades son un signo de madurez y
fortaleza de carácter. Es posible resolver situaciones de una manera amorosa
para generar un resultado positivo para todos los interesados. En el corazón de
toda la materia, sólo existe el amor.
Hasta
la próxima semana…
YO SOY
Hilarión.
©2015 Marlene Swetlishoff
www.therainbowscribe.com